10.15.2013

Colombia, el país de las maravillas en prebendas a congresistas y altos cargos oficiales

La “prima especial de servicios”, creada con un decreto dado a conocer el lunes por el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, le costará al Estado 2.069’392.590 de pesos mensuales.
Si bien esa cifra no es un gasto nuevo, pues equivale a lo que recibían los congresistas antes de un fallo del Consejo de estado que eliminó las primas de salud y localización, el tema ha despertado cuestionamientos en diversos sectores porque se da en medio del ambiente de parálisis legislativa que ha acompañado el trámite de proyectos como el de reforma a la salud.  
El representante a la Cámara, Iván Cepeda Castro, criticó la decisión del Gobierno y aseguró que este caso demuestra que en Colombia no existe una separación real de los poderes públicos.
“Es una relación de chantajes y sobornos que le quita independencia a los poderes e impide hacer un control político real. Cuando los congresistas ven en peligro sus salarios, apelan a la operación tortuga para quitarle dinámica a las iniciativas”, dijo Cepeda.
Por su parte, el Gobierno asegura que el decreto no obedece a una prebenda o a un chantaje para conseguir la aprobación de proyectos que son considerados prioritarios en la presente legislatura.
El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, ha resaltado en diversos espacios desde el momento en que se conoció el fallo del Consejo de Estado, que una reducción de ese nivel en los salarios de los congresistas abre la puerta a una crisis del Estado, en tanto tendría que reducirse también la asignación de otros altos funcionarios.
“La remuneración de los miembros del Congreso es la base para fijar la remuneración de varios servidores públicos, como los Magistrados de las altas Cortes, del Fiscal General de la Nación, del Procurador General de la Nación, el Contralor General de la República y otros altos cargos, y estos a su vez, determinan la remuneración de otros servidores públicos, como Magistrados de Tribunal, Jueces y Fiscales del País, así como Procuradores Judiciales, entre otros”, dice el decreto 2170 de 2013.
Los gastos del Congreso
Aspectos como el costo de las unidades de trabajo legislativo, gastos administrativos de las instalaciones del Congreso e inversiones que no se encuentran contempladas como es el caso de los celulares y las tabletas electrónicas que recibieron hace una semana los 98 senadores, también se suman al ambiente que generó la decisión de crear la nueva prima especial.
Cada paquete, conformado por un celular BlackBerry Z10 y una tableta Samsung Galaxy, tuvo un costo de un millón y medio de pesos, es decir, 147 millones de pesos. Además, el plan de datos para los dispositivos se contrató por un año por otros 195 millones.
Según Cepeda, un congresista no requiere ese tipo de auxilios: “Con el salario que percibe puede comprar la última tecnología, además se ve muy mal que eso pase en un momento en que se deja la sensación de que se está tratando de comprar la voluntad del legislativo”, dijo el representante.