1.25.2010

El desplazamiento forzado e inducido genera caos social

La información consolidada del total de hogares desplazados encuestados, permite afirmar que las milicias urbanas, la guerrilla y los grupos paramilitares son los principales responsables del desplazamiento forzado de población que arriba a las ciudades.
El caso de las milicias urbanas tiene una explicación en el alto índice de hogares desplazados que se vieron obligados a huir de un lugar a otro dentro de la misma ciudad. Es posible, y así lo indica el trabajo de campo, que este alto porcentaje tenga relación, además de la existencia de milicias urbanas de grupos guerrilleros (milicias bolivarianas de las Farc y milicias populares del ELN), con la proliferación de pandillas armadas asumen el control de diversos barrios y zonas de la ciudad e imponen por la fuerza su autoridad, obligando a muchas familias a salir para salvar su vida.
Un 29% de los desplazados no identifican un acto armado tradicional como la causa de su situación de desarraigo y señalan motivos que van desde la "violencia y la pobreza", las "pandillas juveniles" o el "miedo" que impulsa a huir de las zonas de conflictos, hasta la "violencia intrafamiliar", la "violencia entre vecinos" y la "inseguridad" que más que actores, son factores que provocan desplazamiento. Las acciones contra la población civil por parte de grupos guerrilleros que operan en el departamento del Valle, en Cauca, Nariño, Putumayo y Antioquia, también son causa directa de desplazamiento. Algunos indican que este alto índice de responsabilidad de la guerrilla es explicable por las formas de sometimiento violento de la población que ha caracterizado a algunos de éstos grupos en zonas campesinas e indígenas del Cauca y zonas limítrofes con el Valle. La Fuerza Pública (Fuerzas Militares, Policía Nacional y DAS) es señalada como responsable del desplazamiento del 5% del total de los hogares encuestados, un porcentaje relativamente bajo en comparación con los índices nacionales. Por último, los narcotraficantes fueron señalados por un 4% de los hogares desplazados como causa de su situación, en un hecho que muestra sólo una parte del problema, pues es evidente que estos sectores acuden a la presión, la amenaza y la muerte para imponer sus propósitos ilícitos. El temor que caracteriza a esta población hace difícil que señalen a estos sectores delincuenciales. Las amenazas, la intimidación y el terror obligaron a la mayoría de hogares encuestados a huir en busca de seguridad y protección.
Un porcentaje relativamente alto de desplazados se abstuvo de responder la pregunta sobre los hechos que motivaron su salida, en su gran mayoría dentro de la ley del silencio que caracteriza a la población objeto de la presión de los actores armados.
El miedo, respuesta recurrente de los desplazados, los asesinatos individuales y colectivos y los atentados, entre otros hechos, complementan las respuestas sobre las causas de la salida obligada de las personas afectadas de sus sitios de origen y crear un fenómeno social en los centros poblados. Y no se puede dejar de lado los actos que se cometen por parte de la clase política, quienes en su afán de obtener buena votación en las contiendas "democráticas", conllevan al desplazamiento, prometiendo a sus futuras víctimas reubicación en las ciudades, según ellos para mejorar sus condiciones de vida, desde luego son muchos los traumas.

1.18.2010

Reelección presidencial y cuantioso gasto del dinero público

El inicio de año trae consigo el desarrollo de un proceso electoral de vital importancia para el futuro del país. No sólo sabremos si nos dirigimos hacia un excesivo presidencialismo, con la posibilidad de una nueva reelección, también sabremos cómo se recomponen los liderazgos políticos en las regiones del país que fueron azotadas por los vínculos entre grupos ilegales y sectores políticos.
La importancia de los procesos electorales que se desarrollarán en el primer semestre del año 2010 es evidente. Por ello, tal vez como en ningún proceso electoral anterior, las garantías con las que se desarrollan. El debate al respecto ha empezado y durará hasta que se desarrollen los comicios presidenciales el próximo 30 de mayo. De una parte, tal vez obligado por su condición, el Ministro del Interior afirmó tajantemente que las garantías de las elecciones están completamente dadas. Por otra parte, el Registrador hizo saber a la opinión pública que requiere de una suma millonaria para poder garantizar que en las elecciones no se comentan fraudes y el Procurador afirmó que las campañas de candidatos pueden ser infiltradas por grupos armados ilegales, reeditándose así el fenómeno de la parapolítica. Han empezado las declaraciones encontradas, las citadas son particularmente preocupantes porque se dan entre las autoridades nacionales. Este tipo de situaciones no auguran un buen desarrollo del proceso electoral ya que generan confusión entre la ciudadanía, si esta controversia entre autoridades fuese poco, también se debe tener en cuenta que la incertidumbre sobre la posible reelección presidencial no ayuda a aliviar la zozobra al respecto.
En dicho sentido no son acciones que ayuden a aliviar la falta de garantías las constantes propuestas irreales y jurídicamente irrealizables que pretenden viabilizar la realización del referendo. Ejemplo de ello sería aplazar la fecha de la realización de las elecciones presidenciales o solicitarle a la Corte que produzca un fallo modulado sobre el referendo. Aunado a la terquedad de los sectores que apoyan al gobierno que muestran estas propuestas, por cómo se encuentra el espectro político hasta el momento, ningún candidato que pretenda retomar las banderas de la coalición de gobierno estará en verdadera libertad de desarrollar su campaña sino después de un eventual, pero aún posible, rechazó del referendo.
Más allá de la conveniencia o inconveniencia de una nueva reelección, que obviamente es un tema que merece y necesita una profunda reflexión, este proceso electoral se ha caracterizado por girar en torno a sólo un interrogante: ¿podrá el Presidente de la República aspirar a un nuevo período? Poco se sabe de las demás propuestas de los candidatos presidenciales. Esta situación afecta negativamente el debate para el cargo más importante en el país. Sin embargo, el otro proceso electoral también acusa falta de garantías. Esta vez no para los candidatos sino, más preocupante aún, para los ciudadanos. Es indignante que el país no haya aprendido de los errores del pasado. Nos dirigimos hacia un proceso electoral con básicamente las mismas reglas con las que se produjeron en las últimas dos elecciones (2002 y 2006) que fueron incapaces de evitar los fraudes electorales, declarados por el Consejo de Estado, y que no fueron suficientes para sancionar las conductas de aquellos que se aliaron con grupos armados ilegales.
Las campañas electorales para el Congreso de la República que empezarán a buscar el apoyo ciudadano tan pronto inició el año, siendo marcadas por el pasado que busca reeditarse.

1.13.2010

El salario mínimo no incremento, el peso al pueblo se devaluo

La discusión entre gremios y trabajadores se centra todos los años por época de diciembre en cual será el incremento del salario mínimo.
La mayoría de analistas explican que para lograr consolidar la meta de inflación futura, es necesario efectuar incrementos con base en lo proyectado por el Banco de la República.
Si esta teoría se llegase a cumplir, cosa que no pasó, el salario mínimo legal mensual vigente se ubicaría en 511.807 pesos.
¿Por qué? Porque el Banco de la República el viernes 23 de octubre, luego de más de siete horas de reunión acordó que la meta de inflación para 2010 sería la de largo plazo: estaría en el rango entre dos por ciento y cuatro por ciento con tres por ciento como meta puntual para efectos legales.
Eso en palabras cristianas es que la inflación en 2010, según lo proyecta la autoridad monetaria y cambiaria, debe repuntar tan solo tres por ciento.
Sin embargo, también algunos analistas dijeron: un momento, el poder adquisitivo de los colombianos se perdió en 3,2 por ciento, según las cuentas preliminares del Ministro de Hacienda, Óscar Iván Zuluaga. Si esto llega a pasar, que se vislumbraría ser lo más probable, el salario mínimo de los colombianos registrará un incremento de 15.900 pesos. ¿En cuánto va a terminar el salario mínimo si esto ocurre? En 512.800 pesos. Estas cifras muestran que por primera vez en la vida los colombianos que perciben salarios mínimos verán la palabra millón en sus nóminas. ¿Cuánto? Poco más de quinientos mil pesos, es decir medio MILLÓN de pesos.
Sin embargo, la lucha entre trabajadores y gremios se adelantó hasta final de año. Los sindicatos pidieron 10, 11 y hasta 12 por ciento de aumento salario, incluso hasta visitaron la Casa de Nariño para exponerle al Presidente Uribe la necesidad de hacer un incremento "más justo para los trabajadores" y la reunión terminó con declaraciones en las que todos manifestaron que se analizó la situación, pero existe un gran inconveniente porque venimos de una crisis financiera internacional que se incubó en el mercado inmobiliario de los Estados Unidos y que nos está golpeando y que prueba de ello es que en 2009 escasamente vimos un PIB por encima de cero por ciento. Luego de todas estas discusiones que se dan año tras año, vemos al ministro de Protección o incluso al de Hacienda, diciendo: "a lo largo del gobierno del Presidente Álvaro Uribe la totalidad de los incrementos en el salario mínimo han estado por encima de la inflación alcanzando un acumulado cercano a los diez puntos de incremento real logrando simultáneamente una disminución importante en la tasa de desempleo bajando de 18 puntos a 10 puntos de desempleo". ¿Qué es eso?
Y además recordarán que "durante los años 2003 y 2005 se logró un acuerdo concertado entre los trabajadores, los gremios y el gobierno. Infortunadamente este año no se logró concertar, porque las partes mantuvieron posiciones muy distantes y al gobierno le correspondió, de acuerdo con la Ley, expedir el Decreto de salario mínimo". Hoy nos preguntamos, de que sirve ese paupérrimo incremento al salario mínimo, si los precios de la canasta familiar elevaron el doble, incluyendo los aportes a salud y pensión, ¿acaso puede un colombiano de ruana y alpargate sobrevivir con su familia con esos pocos pesos, mientras los congresistas despilfarran la plata y les incrementan en millones?, muchas gracias señor presidente por mejorar la calidad de vida a más de 4 millones de colombianos, uuuuummmmmm, que farsa tan grande estamos viviendo.

1.04.2010

Compartamos juntos los triunfos del 2.009 en esta navidad

El significado de la Navidad en cada Nochebuena se celebra la tradición más universal del mundo. Su sola mención llena de emoción y alegría a los niños, días de fiesta y gratos momentos en los jóvenes, así como placenteras añoranzas y la esperanza del reencuentro con los familiares o amigos, en los mayores.
Llega la Navidad y el comienzo de un nuevo año, se acerca. Diciembre se convierte en el mes más festivo en cada país, en cada ciudad y en cada pueblo. Todos se visten de fiesta. Las luces de colores se encienden, un gran árbol de navidad los identifica, los pesebres vivientes y petrificados se representan a sus pies, y cada habitante renueva sus esperanzas a la espera del nuevo año.
Acoger ahora al Señor que quiere nacer en el corazón del hombre. La fiesta de Navidad invita a reflexionar sobre el amor de Dios que viene a los hombres. El Cristo que tomó parte en la historia de los hombres, hace dos mil años, vive y continúa su misión salvadora dentro de la misma historia humana. Navidad es un acontecimiento divino y humano, que será siempre actual, mientras haya un hombre en la tierra.
Y diríamos que es el momento oportuno y preciso para ese compartir con alegría, con nuestros vecinos, hermanos, con aquellas personas que nos honran con su grata presencia, por quienes durante muchos años no estuvieron con nosotros, he ahí la importancia también de esta memorable fecha, es por ello que el Semanario El Periódico desea compartir esta hermosa y tradicional fecha, con quienes durante todo el año nos apoyaron a través de la pauta publicitaria, es de reconocer el comercio, sector empresarial de Buga y la región, del sector oficial que a través de este importante y tan leído medio de comunicación, divulgó sus diversas actividades de todo tipo y de interés general.
De agradecer en igual manera a nuestros lectores que cada sábado esperan ansiosamente la edición del periódico para enterarse de los hechos registrados y los venideros en cada uno de los municipios del departamento, en igual manera del acontecer nacional, internacional, los temas de farándula, los chismes que siempre dicen la verdad sin irrespetar las personas, aquellos consejos prácticos para las amas de casa, en la oficina o el trabajo cotidiano, y sin dejar de lado los deportes y los temas para la juventud y pasatiempos que como quiera que sean, hacen parte del objetivo de informar, documentar, recrear y educar a la ciudadanía. Es, ha sido y seguirá siendo el objetivo primordial del Semanario el Periódico, contribuir con el progreso de la región vallecaucana, de aportar ese grano de arena para que nuestro relevo generacional continúe con ese trabajo tesonero, que de igual manera heredamos de nuestros adultos o antecesores abuelos y padres.
Queremos compartir con los anunciadores, lectores, clientes, compradores ocasionales, con los gobernantes a nivel municipal, departamental y nacional, los columnistas, grupo de comercialización, a nuestro grupo de colaboradores, cuerpo periodístico en sus diferentes cargos y a todos en general, por los triunfos cosechados y por permitir que este semanario se haya posicionado tan alto como bien lo merece el Valle del Cauca, en contar con un medio de comunicación escrito de gran seriedad, objetividad y veracidad con la información.